Una vez más, el nombre de Yiya Murano vuelve a circular en medios, redes y debates culturales. La miniserie Yiya, estrenada recientemente en Flow, se convirtió en furor y reactivó el interés por una historia que marcó la memoria colectiva: la de la llamada “envenenadora de Monserrat”.
El proyecto, dirigido por Mariano Hueter, propone una narración dual: por un lado, revive la década del 70, cuando Murano —interpretada magistralmente por Julieta Zylberberg y Cristina Banegas— comenzó una red de préstamos que se volvió insostenible y derivó en decisiones fatales; por el otro, un escritor intenta reconstruir, décadas después, la verdad detrás de los hechos.
¿Quién fue Yiya Murano?
Nacida como María Bernardina de las Mercedes Bolla Aponte de Murano, fue acusada en 1979 de asesinar al menos a tres mujeres —Nilda Gamba, Lelia Formisano de Ayala y Carmen Zulema del Giorgio Venturini— mediante envenenamientos con cianuro. Cumplió 14 años de prisión y se convirtió en la primera asesina serial condenada a cadena perpetua en Argentina.

Un elenco de alto impacto
La serie cuenta además con las actuaciones de Pablo Rago, Mónica Antonópulos, Laura Novoa, Diego Cremonesi y Carlos Portaluppi, quienes aportan tensión, profundidad y dramatismo a una trama que evita el morbo, pero no el impacto.
Cinco episodios, una pregunta incómoda
Dividida en capítulos de entre 30 y 37 minutos, la ficción repasa los momentos clave del caso sin caer en la espectacularización del crimen. En cambio, abre una pregunta:
¿qué ocurre cuando la cultura transforma el horror en entretenimiento?
Disponible exclusivamente en Flow, la serie ya generó debate en redes y medios, donde se discute no solo la interpretación actoral sino el modo en que estos relatos dialogan con la memoria social, la ética y el consumo de historias reales.
La figura de Yiya Murano —durante años analizada por psiquiatras, periodistas y especialistas— vuelve a instalarse, una vez más, en el centro del escenario. Y esta vez, con nuevas preguntas que no buscan cerrar el caso, sino abrirlo de nuevo.





